Estoy en las nubes…

Hola a todos!!!

El fin de semana pasado estuve en una comunión, y se me ocurrió llevar algunas chuches para los más pequeños, aunque al final fueron los más mayores los que dieron buena cuenta de ellas.

Cuando vi esta receta de nubes en La receta de la felicidad (pasaros por su blog si no lo conocéis… Sandra tiene unas recetas y unas fotos magníficas!!!!) lo tuve claro… Iba a hacer nubes!!!! O «jamones», como las hemos llamado toda la vida en Palencia… ¿Vosotros las llamábais también así?

Ya llevaba tiempo queriendo probar a hacerlas, y la receta me pareció muy sencilla, así que me puse manos a la obra… o a la gelatina!!!!

Intentadlo vosotros también, que son muy fáciles!!!

Ponemos en un cazo al fuego el agua restante con el azúcar, y la cucharadita de pasta de frambuesa. Con la pasta de frambuesa, además de dar sabor, también conseguimos darle un toque de color. Podéis utilizar vainilla si preferís, o cualquier otro sabor, y colorantes en pasta para colorear las nubes. Esto ya a vuestro gusto!!!

Removemos para que quede la pasta bien mezclada con el resto, esperamos a que hierva y retiramos del fuego.

Echamos en el cazo la gelatina hidratada del otro cuenco con el agua (todo junto).

Removemos bien y volvemos a llevar al fuego, donde seguimos removiendo hasta que rompa a hervir. Lo apartamos del fuego y echamos la mezcla en un bol amplio, donde la dejamos reposar a temperatura ambiente hasta que quede templada. Tarda una hora más o menos. Veremos que está listo, porque la gelatina empieza a cuajar.

Engrasamos una bandeja con mantequilla o spray desmoldante. Procurad que la bandeja sea honda, como de unos 5 cm mínimo, para que las nubes queden gorditas.

Cuando la mezcla ya esté templada, con un batidor de varillas eléctrico batimos a máxima velocidad durante 10 minutos. Veremos que la mezcla empieza a crecer y crecer, como cuando montamos merengue. Parece que se nos va a salir del bol, así que una recomendación… no levantéis las varillas si no queréis pintar toda la cocina de nubes!!!

Echamos la mezcla en la bandeja, y alisamos la superficie. Espolvoreamos con azúcar glacé.

Dejamos reposar a temperatura ambiente hasta que la mezcla esté completamente cuajada, aproximadamente cuatro o cinco horas. Yo la dejé toda la noche, y a la mañana siguientes estaba preparada para cortar.

Desmoldamos y cortamos con un cuchillo en cuadraditos, o si queréis, podéis utilizar cortadores de galletas. Según las vamos cortando, las rebozamos con un poco en azucar glacé, para que no se peguen, y las guardamos en un recipiente hermético (yo utilicé una lata de metal).

Y ya está!!!!

¿Qué os ha parecido? ¿Fácil, verdad? Pues ya sabéis lo que os toca… Y mandadme fotos cuando las repitáis en casa!!!

Besitos a todos!!!